Moclín- Olivares

28 de Septiembre de 2013

Comentado por Antonio

Primer paseo de la temporada a las 9:15h, aparecieron la mayor parte de los andarines y nos hicimos las foto de rigor en Puerto Lope, donde dejamos los coches e iniciamos el paseo. La verdad que todos teníamos ganas de comenzar la temporada y a pesar que el tiempo amenazaba lluvia, nos hizo un día extraordinario. Sobre las 10:00h iniciamos la marcha.


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Iniciamos la subida de Puerto Lope a Moclín por una antigua carretera muy poco transitada y que nos evitó el barro de la noche anterior. Comentar que pudimos disfrutas de una degustación de higos. La mayor parte de los comensales compartiero mi teoría sobre los gusanos en los higos: "Si en higo tiene agujero, el gusano se ha salido y si no lo tiene es que no ha entrado". Nadie perdió el tiempo en comprobar si había gusanos.


Como no podía ser menos, Lidia se entusiasmó con la visión de su pueblo, Tozar, y me pidió la inmortalidad del momento, haciéndose acompañar por Miguel.


Al llegar al Cementerio, iniciamos la subida al Hacho, solamente 5 andarines tomaron las de "Villadiego" directos a Moclín.


Los nuevos andarines alcalinos Paco y Belén, dieron muestras de una envidiable forma física y subieron la cuesta tan campantes.


Al final conseguimos alcanzar la cima del Hacho.


Pudimos contemplar una extraordinarias vistas y tuvimos la suerte de que el vigilante forestal nos permitió subir a la torre. Mereció la pena la subida.


Sin la menor pérdida de tiempo iniciamos la bajada hacia Moclín, por un cortafuegos. Quizás fuera la parte mas pesada del paseo.


Una ver reencontrado el grupo en la Plaza de Moclín, iniciamos la bajada por el Camino de la Virgen de las Angustias hacia Olivares. Existen varios mirados donde merece la pena parar unos momentos y disfrutar de las vistas, tal y como se puede pareciar en la foto siguiente (115)



Nos detuvimos unos momentos para contemplar la Virgen de la Ermita de la Virgen de las Angustias, muy conservada.


Antes de llegar a Olivares nos desviamos directamente hacia el Río Velillos para iniciar la subida del Barranco del Gollizno.


Por lo que pudimos apreciar, los higos no fueron suficientes para saciar el apetito. No estan buscando euros en el suelo, buscan alzufaifas, muy buenas y que nos hizo deleitarnos con su sabor.


Sin miedo, cruzamos el primer puente sobre el Rio Velillos.


Nuestra nueva andarina Isabel, saboré las ricas aguas de la Fuente de Buenventura. Otros leímos la leyenda del bandolero. El nombre de Buenaventura viene por la lectura de la mano de una gitana al bandolero (Leer la Buenaventura).


Desde estas lineas quiero felicitar al Ayuntamiento de Moclín por el esmero que se han tomado en la señalización del sendero y la gran cantidad de carteles explicativas que hay a lo largo de todo el trayecto.


De pronto apareció con todo su explendor el Puente y la Pasarela, que al igual que la fuente, se llama de Buenaventura. Se trata de un paraje muy bonito y que guarda cierto parecido a los Cahorros de Monachil.


Algun@s mas cobardes que otros no cruzaron el puente con la misma alegría que el primero. Nada mas pasar el puente nos adentramos en la pasarela, con unas extraordinarias vistas al río Velillos.


Reiterándome en el comentario anterior sobre la señalizaciones, subimos con energía la cuesta que nos apareció al frente.


Tuvimos un breve descanso en la Fuente de Corcuera, donde repusimos fuerzas y pudimos disfrutar de us exquisitas aguas.


Si le echais una poca imaginación, podréis contemplar las pinturas rupestres con una antigüedad de 5.000 años. En directo se parecían sin problema alguno.


Iniciamos la última, y pesada, subida a Moclín. A pesar de su dureza, mas bien ocasionada porque llevamos 14 Km en el cuerpo, no deja de tener cierto atractivo.


Como no podía ser menos, repusimos fuerzas en Moclín. Por cierto, agradecer a Miguel el adelanto de un día de su Santo. Tuvo la gentileza de invitarnos a todos.


Como en Moclín nos llovió, repetimos la ruta por la carretera para evitarnos el barro.



En resumidas cuentas, llegamos a Puerto Lope y la ruta fue sobre 20 Km y 6 horas de duración. La impresión es que todos disfrutamos de un buen día de senderismo.