Subida al Trevenque

Domingo 2 de Noviembre de 2008

El pronóstico de lluvia para el fin de semana era del 90%, por lo que la idea de realizar alguna ruta se vio totalmente anulada.

Pero sucedio algo inesperado...

Sono el télefono

Carmen: Inma me he levantado y veo que en estos momentos no esta lloviendo, nos vamos al Trevenque???

Inma: Yo también al levantarme lo primero que he hecho es mirar la ventana y al ver que no llovía me he vestido, por si me llamabas, estoy desayunando, pero ahora mismo termino. ¡¡¡¡ Me apunto !!!. Por supuesto. Haber a donde podemos llegar.

A las 10:30h llegamos al Canal de la Espartera, pensando que íbamos a estar solas, pero la explanada estaba llenita de coches de senderistas, sin duda más madrugadores que nosotras.


Comenzamos a subir, con la vista puesta en el cielo, cuando al doblar la esquina nos encontramos con el Trevenque nevado.


Estábamos muy contentas, disfrutando del día que sin pensarlo estábamos pasando.


Ya a nuestros pies podíamos ver la nieve




No sabíamos si nos daría tiempo subir hasta la cima, pues la familia nos esperaba para comer.



Carmen: Nos esperan para comer, pero..., que hacemos..., como nos vamos...,tenemos que llegar al final...

Inma: Sigue, sigue, sigue, que yo todavía nunca he hecho cumbre en el Trevenque, y me hace ilusión


El paisaje era impresionante, estábamos ilusionadas, pero..., teníamos que correr se acercaban nubes sospechosas, además nos seguían esperando para comer.

Carmen en todo momento repetía, "Inma tenemos que fijarnos por donde vamos para no equivocarnos a la vuelta"


¡¡¡ Llegamos !!!
¡¡¡Por fin llegamos!!!



Comenzamos el descenso, con la satisfacción de haber conseguido alcanzar la cima.
Estábamos como en una nube...., nube???, nube de despiste....


Llegado a este punto, Carmen vio algo raro, este camino no es el que traíamos a la ida, con tanto hablar y... sin nuestros guías, algo raro ocurre.

¡Suerte!, nos encontramos con 2 senderistas del Club Mulhacen, que nos explicaron la equivocación cometida, habíamos bajado por el otro lateral del Trevenque y lo mejor era salir hacia la Cortijuela.

¿Como??? ¡¡¡¡No llegaremos para comer!!! ¿¿¿Que hacemos???

Lo único que nos quedaba era correr..., volar....


Decidimos llamar para avisar del retraso, pero..., ni el móvil de Inma, ni el de Carmen tenían batería, tan solo Carmen consiguió mandar un mensaje, un desastre.

Por el carril que iba desde la Cortijuela hacia el canal de la Espartera veíamos pasar coches, coches, coches y..., la tentación de hacer autostop cada vez se hacía más grande.

Se hizo tan grande, que lo hicimos, si señor, lo hicimos...

Gracias a esto llegamos a tiempo para atender la demanda de nuestra familia

El día fue genial y el desenlace al final no estuvo mal.



Comentado por Inma Rubio