Dehesa del Camarate

8 de Noviembre de 2008

Amaneció un esplendido dia de otoño: cielo despejado, nieve en Sierra Nevada, buena temperatura y esa fantástica luz que tiene Granada en esta época del año… ¡todo un lujo! Teníamos, además, un excelente plan para la jornada: excursión a la Dehesa del Camarate y el ascenso a La Corona a 2.227 m. de altitud.

Así que, con muchas ganas y mucho ánimo, nos reunimos 25 compañeros en El Cubo a las 8:30. Después de distribuirnos en los coches, quedamos en reagruparnos en Polícar, un pequeño pueblo cercano a Lugros, para continuar juntos hasta la zona donde aparcaríamos los vehículos y empezaría la aventura.

(Alfredo,Juan,Carmen,Carlos,Manu,Miguel,Lidia,Rafa,Diego,Antonio, Andrés,Heny,Chencho,Rosa,Ana,Pacoto,Jesús,Inma,Inma,Gabi,Silvia, Antonio, Ildefonso, Socorro,Nieves)

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A eso de las 10:30, habíamos llegado a nuestro destino e inmediatamente nos pusimos en marcha. La primera parte de la ruta discurre a través de una pista muy cómoda, con poca pendiente, que asciende paralela al cauce del río Alhama. Nos vino muy bien para desentumecer los músculos e ir calentando para el ascenso que nos esperaba.


Después de pasar la cancela que da acceso a la “Dehesa del Camarate” y de ver....


los primeros ejemplares de las vacas que - como es de esperar en una dehesa- abundan por estos lugares, cruzamos el río y...


empezamos a ascender por una vereda estrecha y con una considerable pendiente, que se va adentrando en un fantástico bosque autóctono de robles y arces. Pronto pudimos ver ya las primeras nieves.


Los colores de otoño, la luz precisa que realza los matices y un cielo poderoso y azul sobre el blanco de las cumbres hacían del paisaje un espectáculo grandioso.

A unos 1.800m. encontramos una pequeña plaza de toros, que en vez de albero, tenía por pavimento una hermosa pradera cubierta en parte por la nieve.


El respetable se instaló en la tribuna y desplegó la gloriosa bandera de la Asociación antes de que nuestras compañeras,


Heny, que actuó con gran arte y pundonor como torero, e Inma que hizo lo propio como toro, nos deleitaran con varios airosos pases que provocaron la ovación y petición de oreja por parte de la peña instalada en la tribuna.

En este lugar, y después de ver el ambiente de toreo, algunillos: Antonio, Chencho, Ana, Heny, decidieron darse la vuelta e ir al comer a Lugros


A partir de aquí iniciamos el ascenso hacia La Corona por donde Dios nos daba a entender, que es lo que a nosotros nos gusta.


Llegado a este punto, en donde nos tomamos un tentempié, un grupo decidió dar por finalizado el ascenso a La Corona, al ver la gran cantidad de nieve acumulada y no llevar ropa adecuada.


Paisaje impresionante, mucha nieve y alguna dificultad porque el piornal, al estar cubierto de nieve, te da sorpresas al pisar en falso.


Carlos iba delante abriendo vía y los demás le seguíamos intentando pisar sobre sus huellas.


La perspectiva del Picón de Jeres y los Lavaderos de la Reina es fantástica desde esta posición y, aunque la subida se hace bastante dura en algunos momentos, el espectáculo que se contempla justifica con creces el esfuerzo.


Once compañeros hicimos cumbre a eso de las 13:30.


Cansados pero felices contemplamos el fantástico espectáculo de las cumbres de Sierra Nevada desde el Veleta al Picón de Jérez.

A veces, en momentos como este, pienso en si somos realmente conscientes del privilegio que disfrutamos los granadinos al tener, tan cerca de casa, esta maravilla de la naturaleza que es Sierra Nevada en invierno.


Nos quedamos un rato en la cumbre disfrutando del paisaje y del sol, que se veía amenazado por unas nubes sospechosas que venían ascendiendo por la ladera.


El descenso se realizó sin problemas, si exceptuamos algún que otro resbalón con culetazo incluido sin más consecuencias.


En un prado, sentados tranquilamente y tomando té que alguien llevaba en un termo, nos esperaban el resto de los compañeros.


Después de comentar un poco las últimas novedades, de hacernos la foto de rigor y con el grupo al casi completo,


realizamos el último tramo de bajada hasta la pista,


cruzamos el río, pasamos la verja de la Dehesa y...


llegamos hasta los coches sobre las 17:00.

Luego cervecita en el bar de Polícar, y despedida hasta dentro de dos semanas que nos vamos al Corazón de la Sandía… ¡otra excursión guapísima!

¡¡Nos vemos en el Corazón de la Sandía!!



Comentado por Carmen