9 de Septiembre de 2017
Promotor: Antonio Escobedo y Silvia
Comentado por Miguel Serrano
Un año más empieza la temporada para la Peña Andarina. La propuesta del día era hacer la ruta medieval de Nieles a Portugos en las Alpujarras y finalmente quedó de Pitres a Cástaras.
Esta vez fuimos en autobús desde el Cubo, recogiendo a Silvia, Antonio, Andres, Andres, Ana, Javier y a Esther en Lanjaron, para llegar a nuestro destino y origen de la ruta que era Pitres.
(Migue, Inma, Loli, Nacho, Gemma, Antonio Escobedo, Silvia, Ana, Javier, Andrés, Guillermina, Mª José, Esther, Mati, Luís, Joaquin, Lidia, Juan, Rafa, Ana Ariza, Jose Antonio, Carmen Cabello)
Comenzamos con un descenso, para ir pasando por las poblaciones de Mecina Fondales y Mecinilla, pueblecitos muy pequeños pero con el encanto de la arquitectura típica de la zona. Por el camino fuimos disfrutando de los frutos de las higueras así como de las moras.
Como era una ruta exploratoria estuvimos buscando alternativas, por lo que bajamos hasta el lecho del rio Trevelez, para comenzar la subida a Ferreirola, donde degustamos su fuente gaseosa que conjuga agua ferruginosa con gas natural. Aprovechando la ocasión para tomar algunas viandas.
Continuamos el camino hacia Atalbéitar, su nombre procede del árabe «harat-albáytar» cuyo significado es ‘barrio del veterinario’, para continuar hacia Busquistar, donde iniciamos el descenso por la bajada de los Helechares, no sin antes haber perdido el sendero, nuevamente junto al río Trevelez.
Aprovechamos la ocasión para disfrutar en una pequeña explanada para disfrutar de las vistas y de la comida, un lugar ya conocido para la peña, para seguir la ruta pasando por un encañonamiento del rio por los Cerrillos Negros, para cruzar un puente, que aprovechamos para hacer las fotos de rigor e iniciar la ascensión al Portichuelo de Cástaras por unas escarihuelas (veredas zigzagueantes que hacen cómodo el ascenso por terrenos muy empinados), donde a la vez que disfrutamos de la subida se admiraba el paisaje por el que habiamos hecho el descenso y las poblaciones que anteriormente habiamos recorrido.
Una vez en lo alto, en el cruce de caminos de Trevelez, Juviles, etc, iniciamos la bajada a Cástaras, pasando por el tunel minero de la Fabriquilla, que se construyó para proteger a los numerosos viandantes de esa Cañada Real de los desprendimientos de mineral de las vagonetas que lo transportaban desde las Minas del Conjuro, pasando por una plantación de fresas que hizo que el sendero fuera mas dulce, para comenzar la bajada del barranco por un camino sinuoso para llegar al barrio alto de Cástaras, y ver lo que el tiempo y el abandono va haciendo sobre las casas, momento que aprovechamos para hidratarnos y reagruparnos y dirigirnos al centro del pueblo, en el cual no disfrutamos de la cerveza pues los bares estaban cerrados.
Pusimos dirección a Trevelez, para saborear de su jamón y de la cerveza. Un buen final para la primera ruta de la temporada.
¡Por una buena temporada!
Pulse en una foto para ver la galería completa
Video Realizado por Nacho